En cualquier lugar
que nos sorprenda
la poesía
bienvenida sea
siempre que ese
nuestro canto de amor
y guerra haya llegado
hasta un corazón abierto
y otros poetas se apresten
a empuñar sus versos
y otros hombres a hacer
de la poesía un arma
con las ráfagas de
las palabras hasta
la victoriosa ternura
y libertad de la poesía.